domingo, 5 de septiembre de 2010

jueves, 26 de agosto de 2010

miércoles, 25 de agosto de 2010

Bacon's studio

Intento decir algo sobre mi último viaje

a manera de resumen

pero no me veo hablando de los murales de Belfast,

ni de las mil tonalidades verdes de Donegal;

igualmente tampoco me veo como cronista de las

extrañas islas de Aran.



Si tengo que seleccionar un momento

quizás sea uno muy atípico,

aquel en que descubrí

el estudio de Bacon.



El estudio de Bacon, trasplantado al centro de

Dublín, y resguardado en un pequeño

y delicioso museo

me recordó esos templos egipcios

que trajeron a Occidente

piedra a piedra

antes de la construcción

de la presa de Aswan.



Me quedé fascinado no sólo

con la inmensidad y el caos de Bacon

sino también con la paciencia con

que habían sido trasladadas

las pinceladas,

con que había sido reproducido

el riguroso

desorden de los objetos.



Como se suele decir ahora

me recreé con esa impostura,

con esa vida encapsulada y reproducida,

y sobre todo disfruté

viendo que pese a todo,

aquello respiraba vida, genialidad;

ese sentimiento que me hace levantarme

y dar dentelladas contra la normalidad,

ese sentimiento, cada vez más

difícil de encontrar ante la domesticación de los

instintos.


Me sentí joven otra vez.


miércoles, 9 de junio de 2010

¿Acaso no eres cada uno de los comics que leíste con catorce años?
Me gustan las palabras
que arañan como
panteras,

y las frases que manchan
los dedos de
arena,

que mojan
los ojos con
sal.

miércoles, 2 de junio de 2010

sábado, 29 de mayo de 2010

domingo, 23 de mayo de 2010

viernes, 21 de mayo de 2010

Rosa Pantopón
























Rosa Pantopón
se levantó y salió de la cafetería,

a través del cristal la vi
los colores de su cuerpo mal ajustados
como esas veces en que los periódicos
muestran las fotos mal acopladas
los rojos y los azules ligeramente fuera
de su sitio.

Y alli me quedé, mis manos sobre la mesa
con las palmas extendidas
sin consumir nada.

La mesa, como todas las mesas
de cafetería de mis sueños,
de madera y plegables
de un gris antiguo,
marcada por fechas,
nombres y corazones
a navajazos.

Rosa Pantopón
volvió de la calle
se acercó
y con la vista fija
en la mesa
se quedó allí de pie,
observando,
pensando.

miércoles, 19 de mayo de 2010

Zurdo




Me encantan las historias de zurdos. Pero sobre todo las de no-zurdos. Como la de Billy el Niño, cuya única foto hizo creer durante cien años (película de Paul Newman incluida) que empuñaba el revolver con la izquierda. Hace pocos años se descubrió que este retrato se había positivado con la placa al revés. Así que lo que hemos estado observando durante un siglo ha sido su reverso siniestro.

lunes, 17 de mayo de 2010

y llegó el calor

y
las
ganas
de
escuchar
funky
en
la
playa
.

miércoles, 12 de mayo de 2010



Cuando vivías en Creffield Road

usabas una mirada tan gastada

que tus manos siempre parecían

desdibujadas.


Si salías a beber, o si aparcabas

tus noches en algún green

todo se diluía.


No sé dónde habías adquirido

esa expresión tan limada,

esos ojos tan de derrota.


Lo que sé es que te añoro;

mi memoria atrapada

entre setos

y cubos de basura

abandonados


de Creffield Road.

martes, 4 de mayo de 2010

martes, 27 de abril de 2010

A martillazos

En la plaza principal del pueblo donde trabajo hay una estatua de bronce que representa a Atanasio, un viejo ilustre con su bastón y su perro, que divisa la plaza sentado en un banco.

Todos los detalles de su sombrero y las arrugas de su cara están minuciosamente anotadas y reproducidas. De ese naturalismo que me provoca ganas de coger un mazo y liarme a martillazos. Me contengo.

Ayer, con motivo del día del libro, organizamos una lectura poética con los chicos del instituto. Neruda, Espronceda y Byron estuvieron allí. Desde el banco que está junto a Atanasio los chicos, algunos apoyados, otros abrazados, otros simplemente acompañados por la estatua, recitaron frente a sus amigos.

Cuando llevábamos un rato, una anciana pasó por allí, y en mitad de nuestra euforia, dijo maldiciendo, junto a mi lado, "si Atanasio levantara la cabeza".

De primeras no entendí. Como si la jerga local me hiciera malinterpretar lo que realmente había escuchado. Cuando conseguí enfocar la imagen, aquello fue suficiente para que se me activara una cadena de pensamientos salvajes.

Comparé la falsa solemnidad de la estatua con la espontaneidad y juventud de mis alumnos. Y ya las arrugas de la estatua no atesoraron experiencia, sino mierda acumulada, y un hábito, una manera de consagrar la existencia por el simple hecho de aguantar, de sumar años. La malicia de los ojos y la confianza en un bastón ya claramente ofensivo terminaron por decidirme.

Recordé el mazo y pensé que sería buena idea transformar esa cara en un cuadro de Bacon. Esta vez no me voy a contener.

miércoles, 7 de abril de 2010

martes, 6 de abril de 2010

Cuando vuelvas de la ciudad

Cuando vuelvas
de la ciudad

reza porque
después de haber
saltado desde
tantas azoteas

y de
haber
rebuscado
en tantos
cubos
de basura,

reza porque
te quede
algo más
que un
par de
alas
rotas

y unas
manos
negras
de
miseria.

miércoles, 31 de marzo de 2010



Me quedó
compartir
contigo mil noches
en el St. Moritz y
un café en Montmartre y
un cigarro en Benarés;

nos quedó comer
hariras en Luxor o
reír ante las alambradas
de Phnom Pehn;

también faltó
tomar el enésimo café
en el Bar Italia
del Soho,
disfrutar de La Sirena y
salir borracho de una disco
de Chueca.

Hubiera estado bien caer
en aquel concierto en Christiania,
y beber una cerveza
en las azoteas de Katmandú,

tampoco hubiera estado
mal
aparecer por casualidad
en Els Quatre Gats,
y ver las tribus de Mae Salong,
y movernos por la noche de los
artistas en el Trastevere.

Sí, hubiera estado bien
todo eso,
pero me tengo
que conformar
con aquella noche
en el Pópulo
donde te vi, colega,
brevemente,
por última vez.










He visto besar tus cenizas
las costas de Trípoli


tras enredarse en la arena de Túnez,
y levantar el vuelo hasta las pirámides,


y también las he visto


perderse por las calles de Izmir,
volar por encima de Cathalonia,


para finalmente
regresar a Sicilia


donde coronar mil volcanes.

viernes, 19 de marzo de 2010

recuerdos que escapan
como cangrejos,
(lateralmente)
y se refugian
en los huecos
de la conciencia

jueves, 25 de febrero de 2010

domingo, 24 de enero de 2010

y llegaron los días salvajes
























y volvieron a cogernos de improviso.